Hoy vamos a explicaros la importancia de llevar especialmente a nuestros hijos al dentista y para esto vamos a aconsejaros los 8 motivos más relevantes.

Para empezar, es muy importante que como padres seamos conscientes que es imprescindible cuidar la salud bucodental de nuestros hijos desde pequeños. A continuación, os detallamos los 8 motivos más significativos que os aconsejamos:

  1. La primera visita se aconseja que se realice entre los 6 y 12 primeros meses de edad del bebé, ya que será el mejor momento para realizar un buen plan de prevención y a la vez para recibir la información adecuada.
  2. La limpieza de la cavidad oral del bebé debe realizarse cuanto antes, incluso antes de que le aparezcan los primeros dientes. Lo más aconsejable es frotando muy suavemente las encías después de cada toma de leche con una gasa húmeda.
  3. El cepillado de nuestros hijos es responsabilidad nuestra hasta los 8-10 años y debe realizarse 3 veces al día con un cepillo adecuado a sus necesidades hasta que ellos mismos sean plenamente conscientes que tener cuidado de sus dientes es una responsabilidad que deben hacerse suya.
  4. Una vez realizado el cepillado, no puede faltar el flúor, ya que es perfecto para proteger el esmalte de nuestros pequeños durante sus primeras etapas de crecimiento y además reduce el riesgo de aparición de caries. Y precisamente será nuestro dentista quien nos aconsejará el mejor flúor para nuestro hijo/a.
  5. Se recomienda retirar el chupete antes que el niño/a cumpla 3 años, ya que por el contrario podría provocar malformaciones en su cavidad dental. Y sobre todo hay que tener en cuenta que debemos dejar que los dientes de leche caigan solos. Nunca debemos provocar su caída de forma expresa.
  6. Si aparecen las primeras caries, se recomienda acudir rápidamente al dentista para realizar sellados y así reparar posibles fisuras y fosas.
  7. En caso de que se produzca un golpe, también deberemos acudir rápidamente al especialista para revisar que no afecte a la dentadura de nuestro hijo/a y tomar las medidas necesarias. Un traumatismo dental puede afectar a sus dientes definitivos.
  8. Debemos controlar la cantidad de azúcares (galletas, zumos, chucherías, refrescos y bollería) que ingieren nuestros pequeños, ya que son la principal causa de caries y enfermedades dentales. Por este motivo, es bueno y necesario acudir a nuestro dentista de forma regular, para revisar que todo esté correcto y si hace falta, limpiar y eliminar el sarro que se haya podido acumular en su boca.

En definitiva, aunque la boca de nuestro hijo parezca estar perfecta, es importante que sea revisada periódicamente por nuestro especialista dental.